La Forêt de l'Éternité

En el Desierto de Monegros, un lugar donde el tiempo y las prisas se detienen pero la naturaleza avanza y se expresa en todo su esplendor, hemos creado un espacio único para el último descanso. Nuestros servicios funerarios no son solo un método de enterramiento, sino un proyecto que construimos junto con la persona que parte, y con quienes la acompañan.

No imponemos un ritual estándar ni una forma determinada de despedirse. En cambio, escuchamos lo que el difunto quiso transmitir, y con eso vamos dando forma a un adiós auténtico, que refleja la vida que se vivió y la tierra donde se vuelve.

El Desierto de Monegros, con su paisaje abierto y silencioso aunque lleno de actividad natural, se convierte en un testigo firme y sereno. Es un sitio que no quiere esconder la muerte, sino que la hace parte natural del ciclo que todos compartimos. La tierra seca, los vientos, el sol y la sombra acompañan el proceso de manera simple y honesta.

Para quienes optan por la cremación, ofrecemos espacios específicos para la sepultura de cenizas o para su esparcimiento. Las cenizas pueden depositarse en diferentes zonas, integrándose con el terreno, como una forma de regresar al aire y a la tierra que tanto conocieron. Plantamos un árbol en memoria del fallecido y de esta manera reforestamos y construimos nuestro Bosque de la Eternidad. 

Además, entendemos que las mascotas son parte de la familia, y por eso también tienen un lugar especial en nuestro terreno. Ofrecemos la posibilidad de acompañar a estos compañeros fieles a un descanso digno en el mismo entorno, cuidando que el espacio que ocupan se mantenga en armonía con la esencia del desierto, un sitio donde la memoria y el cariño se guardan con respeto y sin artificios.

Así, el Bosque de la Eternidad no solo guarda restos, sino historias que se funden con el paisaje, y que quienes quedan pueden visitar y sentir, como si la memoria caminara con ellos por ese terreno abierto.

Este no es un lugar cualquiera, ni un servicio más. Es un acuerdo íntimo entre quienes seguimos aquí y los que han emprendido el viaje eterno, que hacemos juntos para honrar lo que fue y dar lugar a lo que sigue.